Uno de los primeros temas que trató la
publicidad aerocomercial fue el de la modernidad. El avión era un
elemento que producía una ruptura demasiado grande con todo lo conocido
en materia de transporte, y ese cambio fue recogido con mayor o menor
calidad por diversos diseñadores, que lo explotaron en dos variantes
distintas, el contraste con lo antiguo y la asimilación con las grandes
novedades del momento.
En el primer grupo se destacan una importante serie de avisos en los que
se ven aviones y buques de velas, y en el segundo es notable la búsqueda
de una relación con la moda y la arquitectura. En ambas vertientes la
tendencia se mantuvo en el tiempo, y en el segundo caso es interesante
que también muchos productos y servicios buscaron mostrarse junto a
aviones para incorporar el aura de modernidad que éstos difundían.
El transporte aéreo “masivo” llego a la Argentina en coincidencia con el
fin de la Segunda Guerra Mundial y la llegada del peronismo, un gobierno
que se definió a sí mismo como una revolución, y que puso gran hincapié
en la promoción social.
La unión de la idea de la modernidad con el futuro de la clase obrera
aparece en varias publicidades políticas del peronismo, pero no es
habitual encontrarla en avisos de las aerolíneas del momento, que por lo
general apuntaron a la clase media.
La publicidad que traemos hoy es un ejemplo de que hubo excepciones.
LADAR (Líneas Aéreas Dodero S.A. de Agencias y Representaciones, una de
las ramas del grupo Dodero que controlaba a la sociedad mixta de
aviación ALFA, Aviación del Litoral Fluvial Argentino) aprovechó la
imagen tradicional del hachero del litoral (la zona a la que volaba) y
mostró al hombre mirando al futuro, que no era otro que el avión.
En el fondo, esta imagen se encuadra en uno de los leit motivs de
la publicidad aerocomercial de los primeros tiempos (1920/30), en los
que se presentaba al avión como una irrupción de la modernidad frente a
un mundo que se mostraba como del pasado.
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Un Sandringham en el ex
Puerto de Posadas, plantea de otro modo el contraste
entre la tradición y la modernidad del momento
(foto: Vía Víctor José Torres). |
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Buenos Aires 27 de
Octubre
de 2011